"El que mata a puñaladas no puede morir a sombrerazos"

Tal y como está la situación económica y social; el deterioro o falta de valores, el desempleo o empleo mal remunerado y más... observo una mayor involución en mi pueblo venezolano. Si bien es cierto que  América Latina es la región donde más homicidios hay, la mayoría de las muertes violentas es a manos de conocidos; crímenes pasionales, ajustes de cuentas, riñas.. Los delincuentes a sueldo y callejeros, quiénes buscan el sustento de su familia, quienes persiguen satisfacer sus vicios, quienes adoptaron el acto de delinquir como su única forma de vida... han favorecido a un sentimiento generalizado en el resto de la población "EL MIEDO".

Y como es que se puede sentir uno seguro en Venezuela si no hay cuerpos de seguridad que rindan honor a su nombre, si aquí las armas están en manos de la delincuencia, el 90 por ciento de todas las armas del mundo está en manos de civiles, y no de los uniformados. Hemos venido en detrimento de todo lo que pueda brindarnos estabilidad, paz, seguridad... Nos hemos convertido en presos de nuestras propias vidas, la familia presa y la delincuencia suelta.

 

Ahora con todo este tema de la Toma del Rodeo, la situación carcelaria y los miles de afectados que están viviendo una situación en donde los derechos humanos son vulnerados yo me digo ""El que mata a puñaladas no puede morir a sombrerazos". Claro esta muchas veces paga justo por pecador, habrá muchos inocentes tras las rejas, pero estemos claros que la mayoría esta allí porque se lo ha buscado. Yo me uno al sentimiento  de tantas familias que han visto morir a sus miembros en manos de delincuentes, verdaderos inocentes; los hijos, nietos, sobrinos de quienes no llegaron a casa. De niña escuchaba las historias de hechos punibles violentos como un lejano, cuando las leían en prensa o comentaban durante la transmisión de algún programa informativo, pero hoy? es impresionante... Le sucede a tu vecino, a tu hermano, a tu amigo, te sucede a ti.

Como quisiera seguir aquí cuando se produzca un verdadero cambio en mi bella Venezuela, en mi tierra que amo, en  mi gente buena, solidaria, hermana... esa que recuerdo. Quisiera, pero sin mentir este escenario anima a emigrar, asegurar un futuro distinto, sobre todo a quienes más lo merecen, mis hijas.

Sigo con fe de ese mañana  mejor para mi patria querida, será mejor, así será.

Gracias por leerme.

A Mis Hijas: no son mías, pero me hago eco, integridad es hacer lo correcto, aunque nadie lo sepa, vivan fieles a sus principios, cultiven sus valores, respeten las leyes, amen a su prójimo y mantengan siempre presente que la justicia, más aún la divina, siempre alcanza. La Amo.